La temperatura ha bajado unos grados y se me acabaron las excusas para hornear cupcakes. Al menos, eso me han dicho mis hijos. Así que yo que soy una madre obediente me he puesto manos a la obra. Y aprovechando que en el grupo Cocinamos juntas el tema de la semana era el plátano, he decidido que el frosting de queso tuviese ese sabor.
Buenííííísimo. Nada empalagoso, más bien al contrario da un punto de frescor muy rico.
Ahí va la receta.
CUPCAKE DE VAINILLA
- 3 huevos grandes
- 150 grs de harina
- 150 grs azúcar
- 100 cc de aceite suave de acidez 0,4º (ó 150 grs de mantequilla)
- ½ sobre de levadura (7 grs)
- Aroma de vainilla
Precalentar el horno a 200º y montar las cápsulas de cupcakes en la bandeja. Pueden ser cupcakes grandotes o mini cupcakes.
Tamizar la harina con la levadura. Reservar.
Montar dos claras con la mitad del azúcar hasta que hagan picos.
Mezclar el azúcar, las yemas, el huevo restante y batir hasta triplicar el volumen. Añadir el aceite y el aroma.
Añadir a la mezcla la harina tamizada con la levadura y las yemas con una espátula de goma o silicona y de manera envolvente (de abajo hacia arriba).
Llenar las cápsulas hasta 3/4 partes de su capacidad. Si utilizáis un utensilio dosificador de helado es más fácil igualar la cantidad de masa en cada cápsula.
Hornear 15 minutos o hasta que al clavar un palillo éste salga limpio.
Sacar del horno y dejar reposar 10 minutos en la bandeja. Pasado este tiempo, traspasar a una rejilla hasta que se enfríen completamente.
FROSTING DE QUESO Y PLÁTANO
- 200 grs de queso crema (tipo Philadelphia)
- 65 grs de mantequilla
- 100 grs de azúcar glas
- 80 grs de plátano triturado
Tamizar el azúcar glas.
En el cuenco de la batidora batir a poca velocidad el queso muy, muy frío con el azúcar hasta conseguir una textura firme (aproximadamente 3 minutos).
Derretir la mantequilla en el microondas, función descongelación. Ha de quedar derretida, pero no caliente.
Añadir la mantequilla a la mezcla de queso y azúcar, batiendo a poca velocidad unos 3 minutos hasta que adquiera una consistencia firme. Cuando la mezcla sea uniforme integrar el plátano triturado. Batir un par de minutos más.
NOTAS:
- Es muy importante que el queso esté muy, muy, frío.
- Puede ser light, pero no extra-light. Para que la cobertura tenga cuerpo el queso debe tener un porcentaje de materia grasa.
- Para conseguir un frosting perfecto, la mantequilla deberá estar derretida pero nunca caliente.
Para montar los cupcakes
Cargar el frosting en la manga pastelera. Yo lo hice en dos: una pequeña para los mini cupcakes y una grande. Adornar, servir y comer. ÑAMMMM.
¡Que buena pinta! Sin duda, los haré.
Besos
Ya me dirás que tal. Un besazo.
Gracias por tu aportación guapa, no se me había ocurrido poner plátano al frosting de unos cupcakes, ¿me mandas uno? 😉
Ja,ja, ojal pudiese. Me encantara. Un beso.
hola saludos desde mexico solo para preguntar si por la oxidacion del platano el frosting no se oscurece?? gracias..
Hola guapa, encantada de conocerte aunque sea por la red. La respuesta a tu pregunta es no, el frosting no se oscureció en absoluto ni se modificó su aspecto ni tampoco su sabor. Se mantuvo perfecto.
Me ha hecho mucha ilusión que me contactases desde tan lejos. Ha sido un auténtico placer. Estoy a tu disposición.
Un beso enorme.